Lactancia

Buenas noches a todas, 

en primer lugar, deciros que escucharéis mil y un consejos sobre la lactancia materna. Escuchar las recomendaciones del hospital y hacerlo como os aconsejan, es lo mejor. Según las matronas de mi hospital, el pezón y gran parte de la areola deben entrar dentro de la boca del bebé, pues bien, yo tenía los pechos muy cargados y no había manera, Hugo se enganchó a la primera pero si que sentía dolor. Al principio es un dolor que se aguanta, después de varias tomas, los pezones se agrietan y duele. No os voy a engañar, la lactancia a veces, duele. Yo no utilicé pezoneras pero muchas mamás lo hacen, así que tenéis esa opción si os duele mucho. Como crema, os recomiendo purelan, es muy efectiva y no hace falta retirarla antes de las tomas, por lo que facilita la tarea si queréis ir a demanda.

                                   

Fotografía Lorena Hidalgo

Nosotros decidimos llevar a cabo la alimentación a demanda, Hugo fue un niño muy demandante, cada dos horas pedía pecho y para dormirse también pedía estar en el pecho. Lloré por la dependencia que me creaba la lactancia cada dos horas, pero disfruté tanto viendo a mi niño alimentarse de mi leche materna, es tan puro alimentar a tu bebé, que no lo cambio por nada. 

En cuanto a la lactancia a demanda, el pecho de la mujer tiene la capacidad de adaptarse a la demanda de su bebé, por lo que yo tenía la zona tan estimulada que producía mucha leche y tener el pecho tan lleno también duele, así que si vuestro bebé se engancha en el hospital, no tengáis miedo de darle el chupete. El reflejo de succión es innato por lo que los bebés siente la necesidad de succionar y más cuando algo roza sus labios. Mi mayor error, seguir el consejo: "no le des chupete hasta después del primer mes porque si no no se engancha bien"... finalmente, agotada tras días sin dormir, le dimos el chupete y nuestras vidas cambiaron por completo. Seguía comiendo cada dos horas pero después de la toma se conformaba con el chupete.

Fotografía Lorena Hidalgo

La leche materna tiene múltiples beneficios para la salud del recién nacido. A mi, me hubiera gustado seguir hasta al menos el año de edad pero empecé a trabajar cuando Hugo tenía cinco meses y aunque me sacaba la leche para que mi madre y mi suegra se la dieran en biberón, dejé de producir lo suficiente y tuvimos que pasar a la de fórmula. Hugo ya no podía alimentarse bien y empezó a rechazar el pecho, así que con todo el dolor de poner fin al vínculo tan especial que nos regaló la lactancia, tuvimos que hacerlo.

En cuanto pasamos a la leche de fórmula, tenía claro que quería utilizar una sin aceite de palma, así que elegimos Nutribén Innova y la verdad que Hugo la aceptó muy bien y no tuvimos ningún problema.

Si decidía no darle el pecho a vuestro bebé no os sintáis mal, cada mujer conoce su cuerpo y sus limitaciones, lo importante es que hagas lo que quieres hacer y te sientas bien para darle a tu bebé todo el amor y la paz que necesita.

Un abrazo muy fuerte y ánimo con vuestra decisión.